Situado en el barrio de Salamanca, uno de los barrios más castizos y lujosos de la capital, es un referente local para aquellos que buscan calidad en los alimentos. Lejos de las impersonales boutiques de moda de la calle Serrano, el Mercado de la Paz se caracteriza por un servicio cercano entre los tenderos y los clientes. Es el único de los cuatro mercados modernistas que se construyeron en Madrid en el siglo XIX que sigue activo como tal. Un espacio sencillo que permite descubrir el Madrid más íntimo.
(El País)