El Pozo de los Aines es una impresionante sima natural cuyo origen se debe a una de las mas misteriosas leyendas que generación tras generación han acompañado a las gentes de estas tierras del Moncayo.
La leyenda comienza así: "La mañana del 25 de julio de 1535, el rico moro Hamet-Ben-Larbi, cristiano falso, convertido al cristianismo por orden del rey, el día de Santiago Apóstol y despreciando la fiesta, salió desafiante a trillar con sus criados a una era que tenía cerca de la fuente de Juan Gallego"
"Al poco de comenzar la faena sucedió algo insólito. Se oyó un enorme ruido en todo el término, al tiempo que una oscura nube se elevó hacia el cielo desde donde trabajaban Hamet y sus criados".
"Los habitantes de Grisel y de los pueblos del entorno acudieron al lugar aterrorizados y comprobaron que una gran sima se había abierto en el suelo y se había tragado al rico moro, a los sirvientes y a las caballerías"
¡Castigo de Dios!, exclamaron, relacionando lo acontecido con la profanación del día festivo.
(Publicado por Maria Jose Latorre)
La leyenda comienza así: "La mañana del 25 de julio de 1535, el rico moro Hamet-Ben-Larbi, cristiano falso, convertido al cristianismo por orden del rey, el día de Santiago Apóstol y despreciando la fiesta, salió desafiante a trillar con sus criados a una era que tenía cerca de la fuente de Juan Gallego"
"Al poco de comenzar la faena sucedió algo insólito. Se oyó un enorme ruido en todo el término, al tiempo que una oscura nube se elevó hacia el cielo desde donde trabajaban Hamet y sus criados".
"Los habitantes de Grisel y de los pueblos del entorno acudieron al lugar aterrorizados y comprobaron que una gran sima se había abierto en el suelo y se había tragado al rico moro, a los sirvientes y a las caballerías"
¡Castigo de Dios!, exclamaron, relacionando lo acontecido con la profanación del día festivo.
(Publicado por Maria Jose Latorre)