Un acontecimiento nacional, la terminación de la guerra de Africa -cuyo tratado de Paz fue firmado el 26 de abril de 1860- influyó decididamente en el desarrollo de Tetuán. Las tropas españolas, mandadas por el general O'Donnell, a su regreso victorioso a España, acampan en la entonces llamada Dehesa de Amaniel y llenan de vida todos sus rincones. Nace así una barriada que se bautiza con el emblemático nombre de TETUAN DE LAS VICTORIAS.
Juntamente con las tropas vino gente de otras procedencias fundando la barriada ávida de realizar negocios, empezó a establecer comercios -en ocasiones en instalaciones rudimentarias y provisionales- incrementándose la población tan rápidamente que Cayetano Rossell, en su "Crónica de la Provincia de Madrid", publicada en 1865, dice ya: "En el camino que desde Madrid conduce a Chamartín, que es la carretera de Francia, se ha construido últimamente un caserío con el nombre de Tetuán, que si continúa como ha empezado será en breve punto de consideración, al cual concurren diariamente, y sobre todo los domingos y días festivos, multitud de ómnibus que parten desde la puerta de Bilbao, conduciendo gente a los merenderos que existen en aquel sitio".
Juntamente con las tropas vino gente de otras procedencias fundando la barriada ávida de realizar negocios, empezó a establecer comercios -en ocasiones en instalaciones rudimentarias y provisionales- incrementándose la población tan rápidamente que Cayetano Rossell, en su "Crónica de la Provincia de Madrid", publicada en 1865, dice ya: "En el camino que desde Madrid conduce a Chamartín, que es la carretera de Francia, se ha construido últimamente un caserío con el nombre de Tetuán, que si continúa como ha empezado será en breve punto de consideración, al cual concurren diariamente, y sobre todo los domingos y días festivos, multitud de ómnibus que parten desde la puerta de Bilbao, conduciendo gente a los merenderos que existen en aquel sitio".
(Leyendas y anécdotas del viejo Madrid – Francisco Azorín)