A finales de marzo, con la llegada de la primavera y por tanto con el buen tiempo en la Cordillera Cantábrica, el oso pardo pone fin al periodo de hibernación iniciado en los meses de más frío. Es en este momento cuando salen de sus cuevas en lugares poco accesibles para el ser humano y vuelven a recorrer los bosques y montañas.
Los parques naturales asturianos de Somiedo y de Fuente de Narcea, Degaña e Ibias,
albergan la mayor cantidad de osos pardos de la península ibérica y son sin duda los mejores lugares para observar en libertad estos animales.
Diferentes empresas de turismo de naturaleza ofrecen actividades en zonas oseras además de existir observatorios en el parque natural Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias y en el parque natural de Somiedo donde la Fundación Oso Pardo tiene un centro de información donde el visitante puede ver una exposición sobre el oso, conocer y hacer la reserva del programa de rutas guiadas que la Fundación Oso Pardo desarrolla en este espacio protegido.
(ABC Viajar)