En pleno barrio de la Judería, cerca de la Mezquita, Catedral de Córdoba encontramos esta apacible calleja, una de las más tradicionales de la ciudad. Estrechita y sinuosa, sube en una suave pendiente hasta la pequeña plazoleta en la que desemboca. Los balcones enrejados se llenan de flores aromatizando el agradable paseo del visitante. Desde la fuente que centra la plazoleta podemos disfrutar de una de las más bellas vistas de la torre de la Catedral.
En pleno barrio de la Judería, cerca de la Mezquita, Catedral de Córdoba encontramos esta apacible calleja, una de las más tradicionales de la ciudad. Estrechita y sinuosa, sube en una suave pendiente hasta la pequeña plazoleta en la que desemboca. Los balcones enrejados se llenan de flores aromatizando el agradable paseo del visitante. Desde la fuente que centra la plazoleta podemos disfrutar de una de las más bellas vistas de la torre de la Catedral.