Por su belleza, esta pequeña cala, ubicada a seis kilómetros de Santanyí, está entre las mejores playas de Mallorca y siempre aparece destacada en todo listado de mejores playas de España. Se trata de una cala de arena fina y blanca y rocas. Sus aguas turquesas son tan cristalinas que los laúd que llegan parecen levitar sobre el mar. El acceso es complicado por un sendero que acaba en una escalera de piedra y roca. Si no madrugas, en verano será casi imposible que encuentres un hueco para tu toalla.
(National Geographic)