Estos carnavales están declarados de Interés Turístico Nacional, y son de los más conocidos de nuestro país. Uno de sus elementos más peculiares es que unos meses antes de la festividad, la gente guarda los cascarones de huevos, vaciándolos de su contenido y secándolos. En carnaval, los llenan de confetti y los tapan con una mezcla hecha con harina, utilizándolos para aplastarlos encima de las cabezas de sus semejantes, en lo que se conoce como la Batalla de Cascarones.
En los días que duran las fiestas se bebe algo especial, que no falta en ninguna casa ni ningún bar, y que incluso se reparte gratuitamente en algunos puntos del municipio. Se trata de la cuerva, una bebida hecha a base de vinos, frutos y licores.
(Tus casas rurales)