Desde Santander deberemos seguir la A8 en dirección a Oviedo hasta la salida de Virgen de la Peña. Seguimos por la carretera nacional en dirección a Cabezón de la Sal hasta llegar a una glorieta. Allí giramos hacia la derecha por la carretera de ascenso a Bustablado. Poco antes de llegar a este pueblo tomamos el desvío en dirección a Toporías. Pasado este pueblo junto a una curva cerrada, encontramos el cruce indicador de La Gándara. Pasamos junto a un alojamiento rural e inmediatamente llegamos a una bifurcación en la que seguimos a la derecha. Enseguida encontramos el cartel indicador del inicio de la ruta. (Hay otras opciones de acceso tal vez mejores).
Puntos de interés
Puntos de interés
En este punto y en las cercanías encontramos varios edificios de claro sabor ferroviario. Empezamos a caminar por un camino de tierra que en realidad es la antigua base de la vía férrea, como podemos apreciar poco más adelante al observar los terraplenes laterales. El paisaje no es demasiado interesante, formado por hondonadas y suaves relieves calizos cubiertos por arbustos sobre todo espinosos. Lo más interesante es el sendero en sí mismo, que a veces toma la forma de la antigua trinchera y se ve acompañado de vegetación bastante cerrada. En muchas ocasiones vemos los restos de las antiguas traviesas.
No tardamos mucho al llegar al primer túnel, que tendrá unos 100 metros, pero que al estar en curva da una gran sensación de oscuridad. Afortunadamente el suelo es bastante homogéneo, por lo que se supera sin mayor complicación. Al otro lado el paisaje es similar, con una gran hoya a nuestra izquierda. Ascendiendo suavemente la trinchera se vuelve a cerrar hasta acabar llegando a un segundo túnel de similar longitud, pero esta vez recto. Al poco de salir llegamos a la antigua mina de Pozo Montero, que conserva toda la estructura exterior. Desde aquí se tiene una vista de una importante franja marítima, visión que tendremos de cuando en cuando a partir de este punto.
La vía verde como tal acaba en este punto, pero decidimos continuar por el mismo camino, que se vuelve más irregular. Los poco estéticos eucaliptos se van haciendo con el paisaje. El camino se vuelve mucho más irregular y sigue en sentido norte. Ignoramos un camino que viene por nuestra derecha y luego otro que desciende hacia la izquierda. Poco después llegamos a otro camino más marcado que tomamos hacia la izquierda.
Desde este punto Naneamos y ascendemos un poco hasta llegar a la cota máxima del día de hoy (unos 240 metros) en donde se gira de nuevo hacia el norte. Descendemos ignorando un par de desviaciones hacia la derecha. Llegamos a un pequeño rodal de bosque autóctono de robles y castaños y nos unimos a un camino más ancho. Haciendo caso omiso a algunas desviaciones entramos en una zona con un paisaje algo más natural de prados y árboles. De esta manera, siempre en descenso, desembocamos en una pequeña carretera. Podemos tomarla hacia la derecha, pero para no andar por asfalto buscamos un camino que nace casi enfrente.
Por el nuevo camino descendemos un poco, giramos a la derecha y ascendemos un poco. Llegamos a una bifurcación en donde podemos tomar cualquiera de las dos opciones que nos deja ya en el pueblo de Cóbreces. Terminamos el sendero junto al edificio neogótico de la abadía de Viaceli. El regreso lo realizamos por el mismo camino prestando atención a los cruces.
Comentarios
La ruta se puede hacer partiendo de Cóbreces o con dos coches. En esta segunda opción podemos extender la ruta hasta la cercana y preciosa playa de Luana, y si el tiempo es adecuado darnos un chapuzón. Por lo demás es bastante sencilla salvo tal vez la sensación que produce el cruzar los túneles, la cual se puede compensar con una linterna.