Carbajales de Alba y su comarca son conocidos principalmente a través de los bordados y el traje típico, una artesanía que se viene desarrollando en la zona al menos desde el siglo XVI y que se constituye como una labor diferente y singular, con unas características propias muy particulares. Una variada sinfonía de lanas de vivos colores que van confeccionando una auténtica maraña de motivos vegetales, con derroche de rosas, tréboles, campanillas y corazones, da vida a unos bordados que en las últimas décadas han llegado a convertirse en orgulloso símbolo de la provincia de Zamora. Uno de los aspectos más interesantes es conocer su evolución a través del tiempo, su adaptación a nuevas modas o a distintas necesidades, sin renunciar a su esencia. Es precisamente la esencia del bordado carbajalino la que a lo largo de los siglos se ha tenido en gran estima y le ha dado fama, haciendo que sus textiles sean únicos e inconfundibles.
(Museo Etnográfico de Castilla y León)