El Parque Regional alberga una gran variedad de ecosistemas diferentes: playa, dunas litorales, pinar, saladar, charcas salineras, encañizadas (zona pseudomareal) y carrizal.
El estrecho cordón dunar se extiende a lo largo de todo el Parque, paralelo al Mar Mediterráneo. Estas dunas se encuentran semifijas por la vegetación. El litoral del Parque está representado por las playas de costa baja y arenosa, zona más próxima al mar donde se entremezclan flora y fauna de dos ambientes: el terrestre y el marino, esta zona es muy rica en organismos vivos, sobre todo en la arena.
El Pinar de Coterillo, es una repoblación de pinos carrascos realizada en el año 1917 con el fin de evitar el avance de las dunas, que amenazaba con invadir los estanques salineros. Debido a la dureza de las condiciones, la pobreza e inestabilidad del suelo y el continuo viento proveniente del mar, cargado de gotas marinas, vemos que los pinos están muy abatidos y doblados.
Otro de los ecosistemas que encontramos en el Parque es el saladar; un sistema natural complejo, con vegetación esteparia, un suelo cargado de sales, que además se encharca durante una parte del año. En verano, al evaporarse el agua del suelo, las sales son arrastradas hasta la superficie, donde son depositadas formando la típica costra salina blanca. Lo podremos observar en las proximidades de las charcas salineras y en la zona de las Encañizadas. Lo más característico y espectacular del Parque son los estanques o charcas salineras. Existen charcas almacenadoras, calentadoras y cristalizadoras, que al poseer características diferentes de concentración de sal y profundidad, hacen que en su conjunto sea el lugar donde encontramos la mayor diversidad de avifauna del Parque.
(Fundación Eroski)
El estrecho cordón dunar se extiende a lo largo de todo el Parque, paralelo al Mar Mediterráneo. Estas dunas se encuentran semifijas por la vegetación. El litoral del Parque está representado por las playas de costa baja y arenosa, zona más próxima al mar donde se entremezclan flora y fauna de dos ambientes: el terrestre y el marino, esta zona es muy rica en organismos vivos, sobre todo en la arena.
El Pinar de Coterillo, es una repoblación de pinos carrascos realizada en el año 1917 con el fin de evitar el avance de las dunas, que amenazaba con invadir los estanques salineros. Debido a la dureza de las condiciones, la pobreza e inestabilidad del suelo y el continuo viento proveniente del mar, cargado de gotas marinas, vemos que los pinos están muy abatidos y doblados.
Otro de los ecosistemas que encontramos en el Parque es el saladar; un sistema natural complejo, con vegetación esteparia, un suelo cargado de sales, que además se encharca durante una parte del año. En verano, al evaporarse el agua del suelo, las sales son arrastradas hasta la superficie, donde son depositadas formando la típica costra salina blanca. Lo podremos observar en las proximidades de las charcas salineras y en la zona de las Encañizadas. Lo más característico y espectacular del Parque son los estanques o charcas salineras. Existen charcas almacenadoras, calentadoras y cristalizadoras, que al poseer características diferentes de concentración de sal y profundidad, hacen que en su conjunto sea el lugar donde encontramos la mayor diversidad de avifauna del Parque.
(Fundación Eroski)