Bien es verdad que entre los moros españoles era muy popular también la fiesta de San Juan, desde antiguo, y una de las mas veneradas de ellos.
Nuestros árabes festejaban ese día con grandes regocijos y corriendo toros y cañas, como se desprende del siguiente fragmento de un viejo romance morisco:
La mañana de San Juan,
al punto que alboreaba,
grande fiesta hacen los moros
por la vega de Granada,
revolviendo los caballos
y jugando con las lanzas.....
Y sus bellas mujeres, aquellas fascinadoras beldades de rasgados ojos de azabache y de embriagador mirar, cuyas misteriosas endechas aún parecen oírse, en el silencio de la serena noche, bajo las quejumbrosas alamedas del Guadalquivir o tras las bordadas ventanas de la Alhambra, bajaban a sus orientales vergeles a coger flores y tejer guirnaldas, acompañadas de sus damas y de sus esclavas que las entretenían dulcemente con sus cantares.