En 1788 se construyó el nuevo Portal del Lleó, diseñado por Vicente Gascó, y seguidamente se propuso hacer a cada lado del portal una fuente con un león, que venían a sustituir otra fuente antigua. Finalmente sólo se esculpió una de las dos fuentes de estilo neoclásico, con una gran taza redonda y un pilón almohadillado, que se concluyó en 1818.
(La ciudad de las mil fuentes)