Se conservan antecedentes de construcciones particulares desde 1778.
Tradición.—En este sitio se hallaban los jardines de D. García de Barrionuevo de Peralta, y entre ellos era célebre una hermosa calle de álamos, en cuyo centro existió la fuente que llamaban del Piojo, porque a ella acudían para lavarse los pobres de aquellos contornos. Cuando se enajenaron los terrenos vino a quedar un solo álamo, que luego fué cortado porque a su sombra se cobijaban los malhechores para robar a los transeúntes.
(Carlos Cambronero)