Carlos I |
—No puedo discutir con un inferior. Vuestra madre fué una ramera.
—Pero mi padre —respondió don Juan— fue un hombre mucho más grande que el vuestro.
Don Carlos fue Inmediatamente a «chivarse» a Felipe II, que le dijo:
—Don Juan tiene razón. Su padre y mío fue harto más grande hombre que lo será nunca el vuestro.