Santa Orosia es la patrona de Jaca y su diocésis. Se celebra su festividad el 25 de junio: El cuerpo de la Santa se venera en Jaca, y su cabeza en Yebra de Basa.
La tradición dice que Orosia era una princesa de Bohemia que venía a Aragón para casarse con un príncipe visigodo. Su comitiva, a pesar de buscar en su viaje refugio en los Pirineos, fue descubierta por tropas islámicas. El jefe de estas tropas propuso matrimonio a la joven princesa que, para no abandonar su fe en Cristo se negó, tras lo cual fue martirizada decapitándola.
Unos 300 años después, en el siglo XI, se apareció a un pastor que guardaba su rebaño en las proximidades de Yebra de Basa, para revelarle la historia del martirio y la ubicación de las reliquias. Todo esto dignificaba la importancia de Jaca y su Catedral y los orígenes del reino que Sancho Ramírez estaba consolidando en estas tierras tras la muerte de su padre Ramiro I.
En la actualidad cada 25 de junio existen dos grandes celebraciones, una en Jaca (día central de sus fiestas patronales) en la que se realiza una gran procesión. Y otra en Yebra de Basa, en donde se asciende en romería con la cabeza de la Santa por una espectacular senda hasta la pradera de Santa Orosia, a los pies del monte Oturia, lugar en el que se halla su santuario (donde recibió martirio) a 1.550 metros de altitud, allí se representa el típico dance amenizado con el ancestral salterio y con una Pastorada recitada en dialecto aragonés.
La tradición dice que Orosia era una princesa de Bohemia que venía a Aragón para casarse con un príncipe visigodo. Su comitiva, a pesar de buscar en su viaje refugio en los Pirineos, fue descubierta por tropas islámicas. El jefe de estas tropas propuso matrimonio a la joven princesa que, para no abandonar su fe en Cristo se negó, tras lo cual fue martirizada decapitándola.
Unos 300 años después, en el siglo XI, se apareció a un pastor que guardaba su rebaño en las proximidades de Yebra de Basa, para revelarle la historia del martirio y la ubicación de las reliquias. Todo esto dignificaba la importancia de Jaca y su Catedral y los orígenes del reino que Sancho Ramírez estaba consolidando en estas tierras tras la muerte de su padre Ramiro I.
En la actualidad cada 25 de junio existen dos grandes celebraciones, una en Jaca (día central de sus fiestas patronales) en la que se realiza una gran procesión. Y otra en Yebra de Basa, en donde se asciende en romería con la cabeza de la Santa por una espectacular senda hasta la pradera de Santa Orosia, a los pies del monte Oturia, lugar en el que se halla su santuario (donde recibió martirio) a 1.550 metros de altitud, allí se representa el típico dance amenizado con el ancestral salterio y con una Pastorada recitada en dialecto aragonés.